En la década de los 80 una banda irlandesa revolucionaba la música tradicional de su país al aunar el folklore con el punk. Mundiálmente famosos, creemos que ya es hora de recordar la trayectoria de The Pogues.
Fue en 1982 cuando Shane MacGowan abandonaba el grupo punk con el que se inició,The Nipple Erectors , para formar junto con Jem Finer y ‘Spider’ Stacy una nueva banda. El nombre de por sí ya era una declaración de principios, pues provenía del gaélico Póg mo thóin, un contundente ‘Bésame el culo». Absorbían la tan arraigada música popular de su país con el movimiento transgresor punk que se había vivido en todo su esplendor en Gran Bretaña desde mediados de la década anterior.
En 1984 aparece su primer álbum, Red Roses for me, homenaje a una obra del dramaturgo irlandés Sean O’Casey. Las críticas ya hablaban de un soplo de aire fresco, donde lo tradicional se mezclaba de forma natural con temáticas alrededor del alcohol, las broncas y el sexo. Y es que el recorrido de la banda siempre se vio marcado tanto por su música como por sus conocidas juergas y peleas. Sí, estos chicos representaban todos los tópicos de la cultura irlandesa. para bien y para mal.
Cuando el mismo año de su debut actúan en el tour de The Clash acaparan la atención de los medios y Elvis Costello decide producir su segundo álbum, Rum, Sodomy and the Lash (1985), frase atribuida a Winston Churchill. La implicación de Costello con el grupo fue más allá de lo musical, casándose con la bajista, Cait O’Riordan, que es sustituida por Darryl Hunt. Consiguen auparse hasta el nº 13 de las listas de UK y alcanzan el éxito internacional. La revista Rolling Stone incluye este álbum entre los 500 mejores de todos los tiempos.
If I Should Fall From Grace With God (1988), Peace and Love (1989), Hell’s Ditch (1990)… Sus éxitos son continuos, paralelamente al ocaso personal de su líder. Con entradas y salidas continuas de centros de desintoxicación por abuso de practicamente todo, MacGowan abandona la banda en 1990, siendo sustituido nada menos que por Joe Strummer. Sin embargo, sus dos siguientes discos, Waiting for Herb (1993) y Pogue Mahone (1996) ya no están a la altura de las mejores composiciones de la banda, disolviéndose ese mismo año.
En 2001 siete de sus antiguos miembros vuelven a reunir a The Pogues, que en la actualidad siguen actuando en giras internacionales con cierta asiduidad. Especial mención queremos hacer al guitarrista Philip Chevron, uno de los mejores compositores de la banda junto con Shane MacGowan, quien abandonó la formación tres años después que su cantante y que falleció de un cáncer de cabeza y cuello a finales de 2014, sin haber interrumpido nunca su carrera musical (aunque al margen de su mítico primer grupo).
Canciones como Irish Rover, A fairytale of New York (interpretada junto a Kirsty MacColl), Dirty Old Town, Lorelei, Fiesta o Thousands are sailing han pasado ya a la posteridad. Cerramos este artículo con la canción que da título a su tercer álbum, If I should fall from Grace with God, compuesta por MacGowan, una oda a Irlanda y a su deseo de descansar eternamente en ella cuando llegue el momento. Deliciosa.
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Concha Gallén.
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