DESNUDANDO LA MÚSICA: The Cars, adicción sin frenos

The Cars

Crear una sección llamada Desnudando la música es un regalo que nos hicimos a nosotros mismos para, especialmente, recordar/homenajear a los grupos que han marcado nuestra vida o cuya música consigue elevarnos a las cotas más altas de disfrute. Para compensar tanto hedonismo y justificar esta elección, que conlleva discriminar, al menos temporalmente, a otros que merecen ocupar este espacio, intentamos hacerlo coincidir con algún acontecimiento o fecha señalada que ratifique la selección. Hoy encontramos nuestra dudosa excusa para un grupo fascinante, que tal día como hay hace 28 años, anunció su disolución. La banda The Cars, capitaneada por el gran Ric Ocasek es objeto de nuestro culto semanal.

Boston, la ciudad que ha parido bandas tan grandes como los Pixies, The Lemonheads, Aerosmith o Galaxie 500, fue la elegida por Ric Ocasek y Benjamin Orr para comenzar su andadura musical conjunta. Primero con las bandas Milkwood y Captain Swing para la que incorporaron al grupo al guitarra Elliot Easton y al teclista Greg Hawkes. Tras la inclusión del último eslabón, el batería David Robinson, queda conformada la formación completa de la nueva banda, The Cars.

Corre el año 1976 y comienzan a atraer seguidores con una gira por Nueva Inglaterra en la que tocan los cimientos del que será su primer single de éxito, Just what I needed. La discográfica Elektra, responsable de discos de The Doors y The Stooges, entre otros, demuestra continuar con su buen ojo, vaticina que estos chicos prometen y les produce su disco debut, de nombre homónimo. Se lanza en 1978 y en solo cuatro meses consigue vender un millón de copias en su país natal. Además del single de lanzamiento, destacan otros sencillos como My best friend’s girl o Good times roll. Las revistas más reputadas del momento les califican como grupo del año. 

Un año más tarde lanzan Candy-O (1979), con una de las portadas más sugerentes de la historia de la música y que logra alcanzar el tercer puesto en la lista Billboard. A este disco le sigue Panorama (1980), un álbum más experimental que no gusta nada a la critica. No así al público, que les sigue aupando al quinto puesto de la lista de ventas, consiguiendo incluso el favor del reputado Andy Warhol.

En 1981 llega Shake it up, con el que retoman los sonidos más amables de sus anteriores álbumes. Contiene dos potentes medios tiempos, como son Since you’re gone y I’m not the one y, sobre todo, el temazo Shake it up, uno de los más bailables de los bostonianos.

La inquietud de los componentes de la banda les hace afrontar paralelamente a The Cars proyectos en solitario. De este modo, tanto Ocasek como Easton y Robinson comienzan su carrera como productores de otras bandas. Ocasek aprovecha también para lanzar su primer álbum en solitario, Beatitude (1982) y colabora en la banda sonora del film de Scorsese, El rey de la comedia.

En 1984 sale al mercado el nuevo álbum del grupo, Heartbeat City, su disco más exitoso de su carrera. Cinco de sus singles entraron en el top 40 de las listas, Drive, You might think (top 10 ambos), Magic, Hello again y Why can’t I have youCon ese tirón no es extraño que un año más tarde lanzaran una recopilación de sus éxitos.

En 1987 ve la luz Door to Door, último disco de la banda antes de su separación y producido por el líder del grupo.

Cada componente emprende una carrera en solitario, siendo el más regular y exitoso Ric Ocasek. Además de sus discos, es impresionante su carrera como productor. De entre los grupos/cantantes con los que ha colaborado destacan Weezer, Suicide, No Doubt, Iggy Pop, Bad Religion, Hole, Jonathan Richman o Nada Surf… En el caso de Elliot Easton, es un habitual de Creedence Clearwater Revisited, la formación de antiguos miembros de la banda que siguen tocado las canciones insignia del grupo.

En 2005 hay un intento de resurrección de la banda, rebautizándose como The New Cars, con dos componentes originales, Greg Hawkes y Elliot Easton, junto con el reputado vocalista Todd Rundgren haciendo las labores del antiguo líder Ocasek. Recuperaron algunos clásicos de la banda, a los que añadieron nuevo material y algún tema de la carrera del cantante. Su único disco se llamó It’s alive! (2006)

Es en 2011 cuando se produce la verdadera resurrección de la banda, cuando se reúnen para lanzar el disco Move like this. El reencuentro total no es posible debido al fallecimiento un año antes del cofundador Benjamin Orr. El regreso viene en forma de disco con sonidos inapelables, de los que destacamos temas como Blue Tip y, sobre todo, Too Late, que recuperan los sonidos que supusieron la esencia de la banda.

Para acabar, recordamos uno de sus grandes éxitos, Just what I needed, perteneciente a su álbum de debut. Disfruten.

.

Concha Gallén

SÍGUENOS EN FACEBOOK

Un comentario sobre “DESNUDANDO LA MÚSICA: The Cars, adicción sin frenos

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.